Cinco recubrimientos de PRFV, PP, resinas y pinturas especiales se utilizan para proteger los agitadores de la corrosión causada por los productos contenidos en los reactores-digestores. La combinación de diversos productos puede corroer y dañar los agitadores. De ahí la importancia del recubrimiento, como una segunda piel que prolonga la vida de los agitadores gracias a la barrera química que proporciona.